Leemos “Indie” e inmediatamente se nos viene a la mente: No grandes estudios, No dinero, cualquier tipo de dificultades y mucho sacrificio. Afortunadamente estas palabras siempre se hacen acompañar de otra más: Mucha creatividad. Lisanne Pajot y James Swirsky podrían entrar en esta categoría. Con puras donaciones, eventos de recaudación de fondos y sus ahorros han realizado este proyecto, pero no hablarán sobre ellos, han decidido contar como otra comunidad tiene que arreglárselas para ver realizados sus proyectos. Ambos realizadores se han encargado del guion, fotografía, edición y dirección. Indie Game: The Movie tuvo su estreno mundial en un certamen impulsador de los proyectos independientes, el Festival de Sundance 2012, donde obtuvo el premio Mejor Edición (World Cinema - Documental).
El documental nos lleva por un emocionante viaje donde acompañamos a los creadores independientes de juegos que además de crearlos, tienen la difícil tarea de dar a conocer sus trabajos para cumplir sus sueños. Tres juegos, cuatro desarrolladores y sus vidas girando alrededor de una industria.
En nuestra infancia, todos (digo todos, porque si no jugaron son de otro planeta) jugamos Super Mario o Zelda y así fuimos cambiando de consolas y ahora tenemos las opciones a muchas, de distintos colores, sabores y precios, con graficas muy distintas a las que conocimos cuando éramos unos niños. Pero estas grandes compañías se encargan de desarrollar juegos que van orientados a las masas, siguiendo patrones de conducta, algunos dedicados a mercados específicos pero siempre rentables y macro.
El documental recoge las experiencias de Edmund McMillen y Tommy Refenes creadores de “Super Meat Boy”, Phil Fish creador de “FEZ” y Jonathan Blow desarrollador de “Braid”, quienes a esta fecha son conocidos por los gamers del todo el mundo. Pero ¿Que hicieron para llegar dónde están? ¿Cuánto tiempo invirtieron en sus respectivos proyectos? ¿Qué dificultades tuvieron?, todo eso trata de contarnos el documental, de hecho no solo nos cuenta, nos vemos involucrados en la gran aventura de los desarrolladores independientes de juegos. A diferencia de las grandes compañías donde intervienen hasta mil empleados para desarrollar un juego, en las compañías independientes el número se reduce a uno o dos mortales, quienes deciden la forma en que serán desarrollados, siguiendo una forma particular, fiel a su propia visión sin rendir cuentas a nadie y plasmando en ellos su visión particular del mundo. Es decir, hacen juegos que utilizan a manera de expresarse, - tampoco son altruistas- y obtener éxito e ingresos sin dejar a un lado sus ideales.
“Tienes que renunciar algo para obtener otra cosa genial” comenta Tommy Refenes (co- creador de Super Meat Boy) mientras describe que no sociabiliza con nadie porque no tiene (tenía) dinero ni para invitar a su chica. Por momentos olvidé que estaba viendo un documental, nos hacemos parte de la historia hasta llegar al final. Ademas es un deleite ver los gráficos de estos originales juegos. Los protagonistas nos cuentan como desarrollan los niveles de un juego, el proceso creativo para realizarlos, su inspiración y el procedimiento para montarlo. Es un documental obligatorio para los gamers y para los que quieran disfrutar un documental lleno de sacrificio pero muy esperanzador donde los videojuegos se vuelven obras de arte.
Calificación: 7/10
Efectivamente, todos hemos jugado. Yo, especialmente, me pasé los últimos año de colegio jugando en mi computadora.
Suena realmente interesante el documental, habrá que buscarlo por aquí.
Saludos.
Muy interesante el documental, mas interesante ver como la vida de los protagonistas ha cambiado totalmente desde la ultima fecha que narra el film. Ojalá puedas verlo.
Saludos.